martes, 3 de febrero de 2015

PONCHE SEGOVIANO

    Aunque por el nombre, a primera vista pueda parecer  que se trata de una bebida reconfortante,   no tiene nada que ver, se trata de un postre muy apropiado para la época de Navidad, aunque se puede preparar siempre que busquemos un postre para una celebración especial...
yo lo descubrí las pasadas Navidades buscando un postre que no fuera el clásico turrón, al que no es muy aficionada mi familia. Circulan por ahí un montón de recetas, y después de leerme varias lo hice de la siguiente manera, y os puedo asegurar que aunque mi familia no es muy dulcera tuvo un éxito total y la presentación quedó muy bien.
     No es nada de difícil, pero si que es laborioso, se compone de un bizcocho, almíbar para bañar el bizcocho,  una capa de crema pastelera y otra capa de mazapán, como veis un postre potente, y se prepara de la siguiente forma:

    INGREDIENTES
    * Para el bizcocho: 4 huevos medianos; 120 grs. de azúcar; 1 cucharada de jarabe de vainilla (yo pongo de Vahine); 120 grs. de harina y un pellizquito de sal.
    * Para el almíbar: 100 grs. de azúcar; 100 grs. de agua; y se le puede  poner también  el zumo de medio limón o dos cucharadas de algún licor.
    * Para la crema pastelera: medio litro de leche; 100 grs. de azúcar; 50 grs. de Maicena y 3 yemas de huevos.
     *Para el mazapán: 100 grs. de almendra molida; 100 grs. de azúcar glas; 1 clara de huevo pequeño.
     PREPARACIÓN
     Ponemos  el horno a calentar a 180 grados y ponemos en la bandeja del horno un papel de hornear untado con mantequilla (o en una bandeja baja de unos 40/26 cms.).
     Bizcocho: Con las varillas, batimos los huevos con el azúcar hasta que estén muy esponjosos, luego le añadimos la sal y el jarabe de vainilla, volvemos a batir unos segundo y a continuación vamos añadiendo poco a poco la harina, hasta que esté bien integrada.
     Echamos la mezcla encima del papel de hornear y con una espátula se iguala toda la superficie, tiene que quedar un bizcocho delgadito. Lo metemos al horno 8 o 10 minutos, hay que vigilarlo, y en cuanto empieza a tomar color, sacarlo del horno y dejar que se enfríe.
     Almíbar: Ponemos en un cazo todos los ingredientes para hacer el almíbar, llevar a la ebullición y dejar 10 minutos hirviendo a fuego suave, luego retirar y dejar enfriar.
     Crema pastelera: Reservamos una tacita de leche fría y ponemos a hervir el resto; mientras tanto batir las yemas con el azúcar, después incorporar la leche fría que hemos reservado, mezclarla con las yemas y el azúcar  y añadir la maicena procurando que no queden grumos.
    Cuando la leche empieza a hervir, echaremos esta mezcla,  sin dejar de remover con la cuchara para que no se hagan grumos y la dejamos hervir unos segundos.
    Mazapán: Ponemos en un bol el azúcar, la almendra molida y la clara de huevo, la mezclamos bien y formamos una bola que dejamos reposar mientras preparamos todo lo demás. Después la estiraremos con el rodillo, entre dos papeles de hornear hasta que quede una capa fina.

    Una vez que tengamos todo preparado, ya podemos montar el ponche: con un pincel de cocina de silicona, humedecemos un poco el bizcocho con el almíbar ( no os paséis porque si no luego de deshará al enrollarlo), luego ponemos una capa de crema pastelera por todo el bizcocho, y luego con mucho cuidado colocamos la lámina de mazapán, a continuación se enrolla  como si fuera un brazo de gitano y una vez enrollado, se cortan un poquito los bordes laterales para igualarlos. También se puede hacer con forma de tarta cortando el bizcocho para colocar dos o más capas alternando con la crema pastelera y el mazapán.
    Finalmente, se espolvorea con azúcar glas y se forman esos rombos que son muy clásico en este postre, haciendo, los  rombos con un soplete de cocina. Yo como no tenía el soplete, calenté bien unos pinchos de metal que tenía para hacer brochetas y con eso marqué los rombos encima del azúcar glas. No es difícil, solo entretenido, pero yo en una mañana lo hice. !Espero que os guste!





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